Ayer fueron
asesinadas dos personas y me asusta mucho, me asusta y me parece
horrendo porque todo fue un malentendido, una falsa noticia,
multiplicada y compartida, pero esa noticia compartida llevó a la
gente enardecida a linchar, después a humilar y por último matar a
dos personas inocentes.
Dentro del
comportamiento de los grupos se reparte la responsabilidad, les
aseguro que ninguna de esas personas se siente ni totalmente asesina,
ni totalmente idiota por creer ciegamente en lo que alguien le dijo,
hemos sobrepasado los límites.
Con la bandera de
“vamos a castigar a los robachicos” terminaron asesinando a
alguien que era totalmente inocente, de una manera cruel y horrorosa.
En la foto se ve mucha gente alrededor, había demasiados testigos en
la escena, demasiados cómplices.
Me asusta pensarnos
así, como adictos ciegos a las redes sociales sin juicio, como una
mayoría así, como una masa imperdonable que cree más en los
rumores sin comprobar que en lugar de hacer lo lógico, ir a
preguntar a la policía y por qué se les había detenido.
Es delicado lanzar
una acusación de ese tamaño, pero más delicado es perder los
estribos en turba iracunda y decidir matar a alguien, dejarse llevar
hasta las últimas consecuencias de la ira y sin darte cuenta
convertirte en un asesino de un momento a otro.
- No creas todo lo que ves o lees, busca segundas, terceras y hasta cuartas opiniones.
- Las referencias importan y las más famosas no son siempre las más confiables, solo son: las más famosas.
- Duda de todo y no me refiero a todo lo que dice tu pareja, sino a todo lo que te cuentan, a lo que es tomado como una verdad.
- Investiga, investiga, investiga siempre.
- Por más motivos que creas tener, quitarle la vida a alguien no te vuelve mejor.
Comentarios
Publicar un comentario